Wikelman Carmona (New York Red Bulls, 2003)

Cada semana intentaré traeros un pequeño y humilde análisis de un futbolista sub-23 que todavía no sea muy conocido por el aficionado medio al fútbol. Principalmente serán promesas sudamericanas y juveniles europeos, los cuales considero que tienen condiciones para asentarse en el fútbol profesional. Si lo que buscamos ver son talentos nacidos en cualquier punto del mundo con gran proyección casi no hay mejor escaparate que los diferentes equipos del Grupo Red Bull. En América compiten el brasileño Red Bull Bragantino y el estadounidense New York Red Bulls. En este último, el conjunto de la MLS con la menor edad media de jugadores, milita el venezolano Wikelman Carmona. Nacido en el mes de febrero del año 2003, Carmona es el segundo futbolista más joven de la plantilla dirigida por el austriaco Gerhard Struber, sólo por detrás del también volante Caden Clark, quien en el próximo mercado de invierno se unirá a las filas del Leipzig. Llegado en el pasado mes de marzo desde la Academia Dynamo de Margarita, el zurdo Carmona es el único jugador sudamericano del año 2003 que juega en la MLS y, con 15 partidos disputados (11 de titular) de 23 posibles, el sexto jugador aún en edad juvenil de toda la Liga con más minutos sumados esta temporada (799).

A pesar de recién cumplir la mayoría de edad, lo que a primera vista llama más la atención de Wikelman Carmona es que es un jugador muy hecho tanto en lo físico como en lo futbolístico. Su corpulencia no es habitual en jugadores de su edad, pero es que además maneja muchos conceptos tácticos y técnicos, lo cual es algo inusual en los jugadores sudamericanos más jóvenes que aterrizan en Europa o en una Liga cada vez más potente y tácticamente multicultural como la MLS. Los conceptos tácticos adquiridos en la Academia Dynamo bajo el Método Direccional del entrenador español Javier Vidales le han facilitado su rápida adaptación a un nuevo entorno para él, y aún con mayor dificultad debido a la barrera del idioma. Un gol y dos asistencias son los números que suma un Carmona que se ha ganado la regularidad en los onces titulares de Struber, cuando en su misma posición compite, entre otros, con el anteriormente mencionado Caden Clark o el internacional absoluto venezolano Cristian Casseres. Aunque últimamente viene jugando en una especie de enganche por detrás de los delanteros Fabio y Klimala, su posición más natural es la de volante por cualquiera de los dos perfiles, siendo el más adelantado en altura del campo de los centrocampistas y el que más soluciones efectivas ofrece para dar ese complejo paso de unión entre la medular y la línea más ofensiva.

El New York Red Bulls, así como los diferentes equipos de la marca de bebidas energéticas, se caracteriza por emplear un juego muy dinámico, y dónde Wikelman Carmona se posiciona como un hombre clave para darle continuidad a las jugadas en campo contrario. De hecho, con el 79%, el venezolano es el jugador neoyorkino con mejor porcentaje de acierto en el pase en campo rival. En esa parte del campo donde más aparecen los errores del equipo atacante, Carmona decide con una soltura y precisión impropia de chicos de su edad que suelen precipitarse. Dicha efectividad en el pase en zona de máxima dificultad principalmente radica en su gran visión periférica y dominio del balón. Siendo más aprovechado por el equipo en una zona más cercana a la frontal del área rival que a la base de la jugada, Wikelman es un jugador muy peligroso para el rival en esos espacios vacíos que se generan entre centrales y mediocentros rivales porque tiene el habito de con unos muy buenos perfilamientos ganar ventaja antes de recibir el balón, la cual mantiene con un control orientado y prolonga con un pase al pie del compañero más alejado del rival. El mayor ejemplo de esta secuencia se produjo en su asistencia en el primer gol del New York Red Bulls en la última victoria por 0-4 ante el Inter de Miami. Las transiciones defensa-ataque del New York Red Bulls son tan efectivas gracias, en parte, a que Carmona es un magnifico acumulador de ventajas ganadas.

Técnicamente Carmona es un jugador excelso, manejando una gran amplitud de recursos más allá de los controles orientados, sobre todo destacando en el golpeo de balón. Su técnica de disparo seguramente fue lo que más les sorprendió a los scouters del Grupo Red Bull en aquel Sudamericano Sub-17 del año 2019 que Wikelman Carmona disputó con la ‘10’ de la Selección Venezolana, marcando un gol desde fuera del área en la victoria por 4-2 frente a Bolivia. Cuando lo ves en el campo te recuerda en muchas cosas a su compatriota Juan Arango. Perfilamiento hacia adelante, control orientado hacia el lado débil de la presión y golpeo de balón en el momento propicio fue la formula con la cual el venezolano consiguió su primer y hasta el momento único gol en la MLS. Es tal su dominio del balón que es el encargado de lanzar las jugadas a balón parado de su equipo. Le tiene tanta confianza a su golpeo de balón que en sus primeros partidos en Estados Unidos se precipitaba a la hora de buscar portería rival pero, así como en campo rival maneja un buen timming para saber cuándo y cómo debe acelerar el juego y cuando y cómo debe estabilizarlo, con el paso de los partidos está adquiriendo una mayor templanza para comprender cuando es oportuno tirar a gol, y no a portería, en función de su situación y la de sus rivales. Realmente es un futbolista adelantado en madurez táctica, técnica y física, lo cual ha propiciado que la marca Red Bull ya le haya diseñado el camino ideal para llegar en un tiempo menor de lo esperado a la Bundesliga. Su conocimiento del juego, unido a unas grandes condiciones físicas y técnicas, hace que Wikelman esté hecho para llegar y jugar sin mayores problemas de adaptación en cualquier liga europea.